La Soberana Voluntad
En el Cielo Sempiterno de Dios, allí donde solo reina el Amor, la Voluntad Altísima de Dios Uno y Trino, se cumple, se vive y se ama. Nadie hay que no desee otra cosa que cumplir al instante la Voluntad del Rey Eterno; es gozo grandísimo para los espíritus puros que lo sirven y pueblan el Reino de Dios.
¿Qué pasa en la tierra? ¿Por qué no se cumple siempre la Divina Voluntad? Es muy simple, no se cumple porque no se ama a Dios verdaderamente. Porque el amor genuino se manifiesta a través del cumplimiento de su Voluntad. Si pensamos en Jesús y en cómo amó al Padre podemos comprender más acabadamente su ardiente deseo de cumplir todo lo que el Padre le había ordenado llevar a cabo. En este orden de cosas, animémonos a escudriñar en nuestro corazón para ver si verdaderamente estamos cumpliendo esta Voluntad que es Soberana en el Cielo y que debería serlo también en la tierra. Pensemos que donde se cumple la Voluntad de Dios, están los santos ángeles custodiando al alma fiel.